
Se trata de productos financieros complejos, que ‘ofertan’ altas rentabilidades… pero que ligan gran parte de esta rentabilidad a la evolución de ciertos valores en Bolsa. Son arriesgados para los consumidores sin conocimientos financieros.
Los bancos utilizan como gancho las ‘altas’ rentabilidades de sus productos de ahorro inversión para captar pasivo procedente de los ahorros de los consumidores y reforzar así su capital. Esto ha sido siempre así y con la crisis se está acentuando aún más.
En ADICAE
Continuar leyendo: Que no te engañen con la rentabilidad de los depósitos estructurados